El Burgos continúa sin perder en El Plantío, esta vez ante el cuarto clasificado de la tabla que permite al equipo de Calderé seguir en los puestos punteros de la clasificación, empatado a puntos, veintisiete, con su rival, aunque cae a la séptima posición al vencer el Oviedo en Mieres y el Avilés al líder de la clasificación, al Guijuelo en tierras asturianas.
El partido, marcado por las malas condiciones del municipal burgalés, sobre todo en la banda de lateral donde el terreno de juego se encontraba helado, impidió la elaboración de jugadas por dicha banda impidiendo la creación del juego con normalidad.
El Burgos adquirió el papel de dominante, buscando la creación de jugadas elaborando su juego habitual. Pronto llegarían las ocasiones. Gabri pudo adelantar a los blanquinegros justo después de una gran parada de Mikel Aurreko en dos veces a tiro de Manu Barreiro.
Con el paso de los minutos, el partido fue perdiendo ritmo e intensidad, así se llegaría al descanso con el empate a cero inicial y con el control del Burgos pero falto de ocasiones claras de gol.
Tras el paso por vestuarios, el Burgos volvería a ser quien llevase la voz cantante y Gabri por segunda vez en el partido pudo marcar, pero su lanzamiento, a puerta vacía, pegó en un defensor, desbaratando la jugada.
Calderé buscó en el banco la tecla que le faltaba al Burgos, incorporando a Pacheta, Arkaitz y Joaqui. El equipo ganó mordiente en ataque, pero seguía faltando el último toque. Pacheta y Cerrajería lo intentarían, pero primero la defensa y después unos pocos centímetros evitaron que el balón se colara en la meta defendida por Camacho.
Cuando restaban menos de diez minutos para el final, el Ferrol perdonó la ocasión del partido tras un desbarajuste defensivo. Manu Barreiro se encontró un balón muerto en el área pequeña del Burgos pero apareció Cerrajería bajo palos para evitar el gol in extremis.
En la réplica, Pacheta buscó fortuna desde la frontal, pero su lanzamiento fue directamente a las manos del portero. Los minutos pasaban y el partido se abocaba al empate a cero, que no iba a ser malo para ninguno de los dos equipos.
El Burgos continúa entre los equipos punteros, reto que se marcó Calderé a comienzo de temporada y se sitúa a tan solo cuatro puntos del primer clasificado, el Racing de Santander que accedía al liderato tras empatar en O Couto ante el Ourense, también sin goles tras la derrota del Guijuelo ante el Real Avilés.
El próximo partido desplaza al Burgos a Gijón para enfrentarse el sábado al filial del Sporting, equipo que ocupa la undécima posición de la tabla.
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